Las flores durante décadas se han utilizado como demostración de amor, una costumbre que se ha ido transmitiendo generación en generación hasta nuestros días. Pero, ¿cuál fue el origen de esta generalizada costumbre?
Nos lo creamos o no, su origen se remonta a la Edad Media, en dicha época era fundamental entregar un ramo adecuado para demostrar tus sentimientos hacia la otra persona. En caso contrario podría conseguir el efecto contrario.
Entonces este obsequio demostraba cariño, atención, compromiso o amabilidad. Recordemos que entonces el divorcio no era bien visto. Por lo que darle flores a otra persona era algo más de lo que significa para nosotros actualmente.
¿Cuándo regalar flores a tu pareja?
Hoy día pese a que pueda parecer una tradición muy generalizado, no debes adelantarte para tomar esta decisión.
Muy probablemente has escuchado de otras parejas que iniciaron su relación en el momento el que le regalaron floren a su entonces novia. Pero seguramente no te contaron parte de la historia.
En primer lugar debes estar seguro que a la persona a la que tienes pensado regalárselas le van a gustar. ¡Pero no le preguntes! Su personalidad te lo dirá todo.
Si es una persona cariñosa, que le gusta la naturaleza y los planes románticos. Irás por buen camino. Pero no te adelantes, necesitarás cumplir los siguientes puntos para acertar.
En segundo lugar debes elegir el lugar donde le vas a regalar las flores. No es lo mismo regalárselas en su casa que en un restaurante. De nuevo: ¡No le preguntes!
Si es extrovertida muy seguramente disfrute más el regalo en un restaurante o un barco. Pero si es introvertida lo más probable es que si le regalas las flores en un lugar público le resulte incómodo. Aunque también se puede ser discreto en un restaurante adecuado.
Los dos filtros anteriores son los más decisivos y será fundamentales para tomar la mejor decisión. Pero aún queda cuando, ¿Cuál es el mejor momento para regalárselas?
Aun habiendo acertado en los dos puntos anteriores todavía puedes fallar. Ten cuidado.
Si esperas que te diga un punto exacto de la relación en el que regalárselas, no existe. El momento aparecerá por sí solo, solo debes esperar. Aunque es verdad que hay situaciones que se predisponen a tomar esta importante decisión.
Entre estas situaciones destacamos un aniversario de pareja, el día de San Valentín, en su cumpleaños o un viaje de pareja.
Todas estas situaciones son idóneas para dar este primer gran paso. Pero ten en cuenta que una vez que lo hagas perderá la magia de ser la primera vez. Con esto no te estoy diciendo que lo prolongues lo máximo posible, sino que busques que esa primera vez sea en una ocasión muy especial. Y por supuesto que las flores estén a la altura de la situación.
Si no es tu primera vez, deberás leer las siguientes situaciones en las que las flores son una buena opción.
Ocasiones especiales para enviar flores
1. Has metido la pata
Las personas comenten errores, es lo más normal del mundo. Asique relájate, ve a tu floristería más cercana y compra las flores más bonitas que veas.
Puede que el ramo no soluciona ningún problema pero dará para a mejorar la situación y resolver el problema.
2. Lleváis mucho tiempo sin veros
Sin duda se trata de una ocasión especial. Asique arréglate, elige las mejores flores de la tienda y reserva un plan especial para entregárselas. Te puedo asegurar que recordará ese momento por mucho tiempo y revivirá la chispa entre vosotros.
A veces los mejores recuerdos están en las pequeñas cosas.
3. No tienes ningún motivo
No te preocupes, si vuestra relación va bien pero crees que no era como antes. De nuevo se convierte en una ocasión especial. Los regalos inesperados suelen ser los mejores, por lo que busca el mejor momento y dale el regalo que tanto merece.
Con total seguridad le gustará, no tengas dudas.
El mayor regalo eres tú
Recuerda siempre esto. Solo conseguirás que a tu pareja/novia le gusten las flores si se lo consigues expresar adecuadamente. Puede que le regales las mejores flores del mundo, pero si no consigues trasmitirle que son las mejores no le gustarás.
Tranquilo/a es muy sencillo. Lo único que tienes que hacer es que te gusten a ti mismo. Si en el momento en el que le das el regalo a la otra persona lo estás disfrutando, le gustará.
Lo determinante no es ni el lugar, ni el momento, ni la situación. Eres tú.
